extraña sensación
con mi pena, Tristeza se hace una trenza,
y después la pasea por cada mirada,
al despertar me camela,
si descanso no descansa de darme la vara,
ojalá se muriera...
...mañana, más sola que el aire,
tirada en la cama, mañana,
tapada con sueño,
pintando a colores mi mundo pequeño.
Kutxi Romero Lorente
me he levantado muy extraño, quizá porque anoche me acosté mal, un poco pasado y muy mareado, y triste, muy triste. Hoy estoy raro. Tengo un poco de ansiedad; bueno, bastante, la verdad; nervios ... y no sólo por la exposición. Tengo una rara sensación de pérdida de tiempo constante, me siento mal cuando estoy ocioso. La verdad es que me siento terriblemente solo, y a mí siempre me ha gustado la soledad, siempre la he llevado fenomenal, pero ahora ... O es esta casa, no lo sé, pero me siento mal cuando estoy solo. Tengo unas ganas inmensas de hablar y no tengo con quién. No tengo a nadie que pueda llegar a comprender qué estoy sintiendo en este sitio, cómo me siento o qué quiero hacer, da igual la cuestión. En cierto modo, se me ha juntado todo de golpe y, lo cierto, es que se me está atragantando todo, cuesta digerir tantos cambios de golpe. No lo estoy llevando bien.
Estaba pensando en ir a Madrid hoy mismo. Trabajar todo el día con el barnizado de los cuadros, un último repaso a los marcos, comprobar que todos están firmados, cerrar la casa y marcharme a Madrid. Al menos, el ir a la autoescuela me distraería, escucharía a alguien hablar sin que lo haga desde dentro de ningún aparato.
por alguna extraña razón, hoy todas las canciones que escucho me suenan especialmente tristes, y me siento como en el video este de MAREA.
.oOo.
sigo en casa, retocando cosas de la web ... he incluído una sección nueva en esta web que ya estaba en otras versiones (zen release) ... y he quitado la licencia, de momento. Al menos me he distraído un rato escribiendo código. Son las 12:23 del medio día ... y parece que estoy un poco más tranquilo, aunque no demasiado.
necesito contacto inteligente, necesito complicidad, necesito escuchar una voz que me diga cosas agradables, un abrazo, besos ... y salir de la esquina de este colchón descolorido.
me encantaría, ahora, una llamada de teléfono que me ayude a salir de este tedio. Me encantaría escuchar el móvil y después te quiero, ven o voy, me haría sentir importante y no tan vacío. Seguramente mirándote a los ojos econtrase ese hueco entre las nubes que me permitiese ver el azul radiante del cielo que, seguro, está ahí; y la tristeza desaparecería porque yo no sólo vivo del aire, necesito tu sudor.
.oOo.
si me muriera hoy ¿con qué cosas me quedaría?
sí, sigo vivo, y coleando, y me quiero quedar con lo mismo y pocas cosas más. Estos últimos días estoy haciendo un ejercicio demasiado duro: intento deshacerme de cuantos objetos se identifican con hechos, personas y momentos de mi pasado. Voy tirando a la basura todo aquello que me ha supuesto un lastre enorme a lo largo de mi vida para que así, el día que toque, lleve el menor equipaje que sea posible. Caminar con tanto se me está empezando a hacer demasiado penoso, cada día más; y además todo ese equipaje de recuerdos y sentimientos es como una losa enorme que tengo que llevar siempre encima. Ya no tengo ganas ni de explicar sus significados porque, realmente, ya no creo que los tengan.
.oOo.
recibo tu llamada que me pregunta "¿qué tal estás?" ... y me siento un poco más reconfortado. Quiero verte y es lo que más quiero hoy, y sólo eso. Aunque ahora tengo un poco de hambre, pero aguanto bien.
y después la pasea por cada mirada,
al despertar me camela,
si descanso no descansa de darme la vara,
ojalá se muriera...
...mañana, más sola que el aire,
tirada en la cama, mañana,
tapada con sueño,
pintando a colores mi mundo pequeño.
Kutxi Romero Lorente
me he levantado muy extraño, quizá porque anoche me acosté mal, un poco pasado y muy mareado, y triste, muy triste. Hoy estoy raro. Tengo un poco de ansiedad; bueno, bastante, la verdad; nervios ... y no sólo por la exposición. Tengo una rara sensación de pérdida de tiempo constante, me siento mal cuando estoy ocioso. La verdad es que me siento terriblemente solo, y a mí siempre me ha gustado la soledad, siempre la he llevado fenomenal, pero ahora ... O es esta casa, no lo sé, pero me siento mal cuando estoy solo. Tengo unas ganas inmensas de hablar y no tengo con quién. No tengo a nadie que pueda llegar a comprender qué estoy sintiendo en este sitio, cómo me siento o qué quiero hacer, da igual la cuestión. En cierto modo, se me ha juntado todo de golpe y, lo cierto, es que se me está atragantando todo, cuesta digerir tantos cambios de golpe. No lo estoy llevando bien.
Estaba pensando en ir a Madrid hoy mismo. Trabajar todo el día con el barnizado de los cuadros, un último repaso a los marcos, comprobar que todos están firmados, cerrar la casa y marcharme a Madrid. Al menos, el ir a la autoescuela me distraería, escucharía a alguien hablar sin que lo haga desde dentro de ningún aparato.
por alguna extraña razón, hoy todas las canciones que escucho me suenan especialmente tristes, y me siento como en el video este de MAREA.
sigo en casa, retocando cosas de la web ... he incluído una sección nueva en esta web que ya estaba en otras versiones (zen release) ... y he quitado la licencia, de momento. Al menos me he distraído un rato escribiendo código. Son las 12:23 del medio día ... y parece que estoy un poco más tranquilo, aunque no demasiado.
necesito contacto inteligente, necesito complicidad, necesito escuchar una voz que me diga cosas agradables, un abrazo, besos ... y salir de la esquina de este colchón descolorido.
me encantaría, ahora, una llamada de teléfono que me ayude a salir de este tedio. Me encantaría escuchar el móvil y después te quiero, ven o voy, me haría sentir importante y no tan vacío. Seguramente mirándote a los ojos econtrase ese hueco entre las nubes que me permitiese ver el azul radiante del cielo que, seguro, está ahí; y la tristeza desaparecería porque yo no sólo vivo del aire, necesito tu sudor.
si me muriera hoy ¿con qué cosas me quedaría?
- con un par de fotos que hice
- con una foto que me hicieron
- con el libro de "En el camino"
- con el libro de "La lluvia amarilla"
- con la primera vez que estuve en un pueblo abandonado
- con un paseo por el campo
- con aquella mirada y las lágrimas de su ilusión en el Círculo
- con la mañana del 14 de mayo de 2005 y la noche del miércoles 25
- con la comida japonesa, mirándonos
- con un cuadro de los últimos que he hecho
- con un par de canciones que me cambiaron la vida
- con alguna poesía escrita por mí
- con las olas de San Vicente de la Barquera
- con la playa de Zarautz, en invierno
- con su beso en el museo
- con la idea de que hago las cosas lo mejor que sé
sí, sigo vivo, y coleando, y me quiero quedar con lo mismo y pocas cosas más. Estos últimos días estoy haciendo un ejercicio demasiado duro: intento deshacerme de cuantos objetos se identifican con hechos, personas y momentos de mi pasado. Voy tirando a la basura todo aquello que me ha supuesto un lastre enorme a lo largo de mi vida para que así, el día que toque, lleve el menor equipaje que sea posible. Caminar con tanto se me está empezando a hacer demasiado penoso, cada día más; y además todo ese equipaje de recuerdos y sentimientos es como una losa enorme que tengo que llevar siempre encima. Ya no tengo ganas ni de explicar sus significados porque, realmente, ya no creo que los tengan.
recibo tu llamada que me pregunta "¿qué tal estás?" ... y me siento un poco más reconfortado. Quiero verte y es lo que más quiero hoy, y sólo eso. Aunque ahora tengo un poco de hambre, pero aguanto bien.
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